La ayuda solidaria del Embajador Arguello

Recuerdos de una historia con final feliz , ocurrió en el 2012 y continua vigente el agradecimiento al Embajador Argentino  Jorge Arguello

“Hace un mes que estamos paralizados y si esto no cambia deberemos comenzar a despedir personal «, le decía Omar Romano Sforza, ex presidente de la empresa farmacéutica veterinaria Bedson S.A. al diario La Nación . Ocurrió hace ocho años, en mayo de 2012.

Una empresa exportadora de tecnología que daba empleo a 110 personas en Pilar  estaba contra las cuerdas. ¿El motivo?  : la súbita modificación de los plazos para liquidar divisas de la exportación dispuesta por el entonces presidenta Cristina Kirchner con la resolución 142. De golpe y porrazo, estos plazos se reducían a plazos imposibles.

«Hace un mes que estamos paralizados y no conseguimos que nadie nos escuche. Hemos escrito al ministro de Economía, Hernán Lorenzino; al secretario de Comercio, Guillermo Moreno; a la presidenta Cristina Kirchner. Pero no hay respuesta. Si la situación no se revierte vamos a tener que empezar a despedir personal, algo que no queremos», decía Omar Romano, Sforza, ex directivo de Bedson SA, un laboratorio farmacéutico veterinario líder argentino que  hoy supera los 40 años de vida.

En el 2012, esta empresa exportaba el 97% de su producción a más de 40 mercados del mundo. Un abanico de clientes construido a pulmón a lo largo de años de historia. “Si no exportamos, nos morimos. Pero si exportamos y no ingresamos las divisas en 30 días, vamos presos; esto es como vivir una pesadilla», decía el empresario.

Un mal sueño que se volvía más paradójico si se tiene en cuenta que el laboratorio representaba “el” modelo que promocionaba el gobierno de Kirchner: producción local y exportación de tecnología.

«El problema es que quieren que lo hagamos en tiempos que no son los verdaderos del mercado, que en nuestro terreno son mucho más amplios. Ahí es donde perdemos, porque las multinacionales pueden defenderse y financiar sus ventas. Nosotros, que somos una pyme, no», añadió.

Situada sobre la ruta 8, a la altura de La Lonja, en Pilar, Bedson continua produciendo medicamentos y aditivos alimentarios para el sector avícola y veterinario. Genera investigación e innovación tecnológica y compite con multinacionales muy fuertes.

El agua empezaba a subir y nadie respondía. Perdieron algún cliente en las cuatro semanas que no pudieron operar. «Mi intención no es confrontar con el gobierno. Lo que pedimos es que nos escuchen. Ojalá esto sirva», se esperanzó Romano.

Hoy aquella pesadilla es historia. Hubo una persona, solo una, que escuchó y movió los hilos para dar con una solución: fue el hoy nuevamente embajador en Estados Unidos, Jorge Arguello. Si  él no prestaba oídos, hubiera sido negra la suerte de una Pyme multi premiada en la Argentina y negro también el futuro de 110 puestos de trabajo,.

“Es importante reconocer y agradecer”, reitera hoy Romano Sforza. “Puede parecer una historias mínima, pero hizo una enorme diferencia”.

Los años pasaron. Hoy, a la vez que agradece nuevamente, Bedson y Omar Romano Sforza , hacen votos por la misión de un funcionario que supo escuchar y comprometerse. Y desearle todo el éxito en su renovada función como embajador en Washington.

 

Roberto Torres / kambiopositivo.com