¿Qué es un plan estratégico?

Un plan estratégico para una empresa es un documento que describe los objetivos a largo plazo y las estrategias que utilizará para alcanzar esos objetivos.

El plan estratégico puede incluir información sobre la visión, misión, valores y cultura de la empresa, así como un análisis del entorno externo e interno en el que la empresa opera. También puede incluir un análisis de las fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas (análisis FODA) de la empresa y un plan para abordar esos factores.

Una parte importante del plan estratégico es la identificación de los objetivos específicos que la empresa quiere alcanzar y los indicadores clave de rendimiento que se utilizarán para medir el progreso hacia esos objetivos. En conjunto, el plan estratégico es una herramienta crítica para la toma de decisiones y la gestión efectiva de una empresa a largo plazo.

¿Como se hace un plan estratégico?

Para hacer un plan estratégico para una empresa, se pueden seguir estos 7 pasos:

  1. Análisis del entorno: Comienza por analizar las tendencias del mercado y la competencia y cómo afectan a la empresa. Identifica las oportunidades y amenazas que enfrenta la organización.
  2. Definir la misión, visión y valores corporativos: Hay que definir claramente la misión (el propósito de la empresa), visión (dónde se quiere que esté la empresa a largo plazo) y valores corporativos (los principios fundamentales que rigen el comportamiento de la empresa).
  3. Establecer metas estratégicas: Definir los objetivos estratégicos de la empresa y las metas específicas y medibles que se deben alcanzar para lograrlos.
  4. Desarrollar un plan de acción: Identificar las estrategias específicas y los planes de acción necesarios para alcanzar los objetivos y metas .
  5. Asignar responsabilidades: Asignar responsabilidades específicas para las diferentes tareas y planes de acción.
  6. Establecer un sistema de seguimiento y evaluación: Implementar un sistema para medir el progreso hacia los objetivos y metas estratégicas y evalúa regularmente los resultados.
  7. Revisar y actualizar el plan: Revisar y actualizar regularmente el plan estratégico para adaptarlo a los cambios en el entorno empresarial y para asegurarte de que sigue siendo relevante y efectivo.

Es importante tener en cuenta que los detalles específicos del proceso de planificación estratégica dependerán del tamaño y la naturaleza de cada empresa, así como de sus objetivos y recursos.

Cuando una empresa no tiene un plan estratégico

 Entonces puede experimentar una serie de consecuencias negativas. A continuación, se mencionan 5 de ellas:

  1. Falta de dirección y enfoque: sin un plan estratégico, la empresa puede carecer de una visión clara de hacia dónde se dirige y cuáles son sus objetivos a largo plazo. Esto puede conllevar a una falta de dirección y enfoque en sus actividades diarias.
  2. Incoherencia en la toma de decisiones: cuando cada miembro de la empresa trabaja de forma individual y sin un plan o protocolo a seguir, las decisiones que se toman pueden no estar bien coordinadas, lo que puede provocar una incoherencia en la toma de decisiones.
  3. No se optimizan los recursos: sin un plan, la empresa puede no saber cómo utilizar de manera óptima sus recursos, lo que puede provocar una falta de eficiencia y de rentabilidad.
  4. Falta de competitividad: las empresas sin planes estratégicos pueden estar en desventaja frente a otras empresas que sí cuentan con ellos, especialmente en tiempos de incertidumbre o cambio.
  5. Dificultad para medir el progreso: sin un plan estratégico, puede resultar complicado establecer objetivos medibles y conocer el progreso que se ha hecho hacia su consecución.

En resumen, tener un plan estratégico es fundamental para que una empresa tenga una dirección clara, un enfoque definido y pueda optimizar sus recursos, ser competitiva y medir su progreso hacia la consecución de sus objetivos.